184.- ENSAYOS CON EL BOTE DEL ENCENDIDO

Como último paso para acabar con el dichoso doble encendido, que ya me estoy arrepintiendo de haberme metido en semejante berenjenal, queda poner un contrapeso en algun lugar ignoto del bote del encendido, que a pesar de las explicaciones que he recibido del mago Minchán, no he sabido llevar a cabo.

Para orientarme de lo que tenía que hacer, me puse con un bote de encendido viejo y roñoso que tenía guardado por si había que aprender algo desmontándolo, y mira por donde, llegó la ocasión. Por cierto, esto de practicar en el cadaver antes que en el vivo es una sana costumbre que tenemos los médicos.

El objetivo era meter la piececita que está dentro de la bolsa en algun sitio del bote del encendido, sitio que no he logrado encontrar.

Las indicaciones hablaban de quitar los dos tornillos de la tapa, cosa que hice, encontrándome esto:

Una especie de esponja rota y pringosa tapizaba la cara interna de la tapa. Llevado de ese impulso irrefrenable de limpiarlo todo que nos da de vez en cuando, la quité y la limpié y seguí con la operación.

A continuación había que quitar los otros dos tornillos

y, ya puestos, pues quité el anclaje de la pastilla de los cables, una especie de tornillito de plástico

y un aro de sujeción incrustado en una ranura del bote

A partir de ahí, quitando dos circlips

y los tres tornillos periféricos, de forma que pude sacar todo esto, que gira y que está tan oxidado

y me encontré uno de los muelles roto en una de las sujeciones. Menos mal que el bote ya estaba roto, porque si no, me da algo ver una cosa así de oxidada. En el fondo, con estas piezas fuera, se veía esto

Y sospecho que es por esa zona por donde se debe poner la pequeña pieza.
Saciada mi curiosidad sobre qué había dentro del bote, pero sin saber todavía donde va la pieza que me mandó Maxboxer, seguí haciendo lo que me habían indicado, y que es por donde debía haber empezado:

Sacar esa especie de muelle de dos vueltas

e intentar sacar el pasador ese que está tan ajustado

y que se negó rotundamente a salir, por mas golpes que le dí, incluso aplicando calor con el minisoplete,

hasta el punto de dejarme el punzón así:

Para acabar, volví a montarlo todo, excepción hecha de los dos muellecitos, que no hay forma de ponerlos si no es desde abajo, desde el sitio que no he podido abrir. Conclusión: el próximo dia me traigo el bote del encendido (el bueno) lo meto en un paquetito junto con la pieza pequeña esa que no sé donde va, y se la mando por correo certificado al mago Minchán, y que él disponga lo que quiera. Esto me sobrepasa bastante.