viernes, 28 de octubre de 2011

268.- CUARTO CUMPLEAÑOS DEL BLOG

Pues sí; un añito más, y como siempre, me pilla en Benidorm. No, no es mala suerte, sino un gustazo llegarse hasta la otra punta de España a ver a un montón de amigos a los que a lo largo del año solo ves en fotos aunque hablas con ellos casi todos los días. Por cierto, Curro: muchísimas gracias por el trabajazo que te pegas para que esto salga como sale siempre.
Hace ya cuatro años que empecé a contar historias de las cosas que le iba haciendo a mis motos (por aquella época eran dos: Triumph Sprint 955 y BMW R100RS); unas me salían medio bien y otras medio mal, pero a todas les echaba un montón de ilusión, casi tanta como la que les sigo echando ahora, aunque se han duplicado en número y ha habido incorporaciones y bajas intermedias (Maya, la sevenfifty, la hondita 125 y la Sprint 1050). Por cierto, ahora se cumple también un año de la adquisición de la mas moderna, la BMW R1100S, el misil amarillo, que la recogí el año pasado por estas fechas, y precisamente en Benidorm.
No voy a hacer propósitos de nuevo año para el blog porque me parece que le queda poco, y no por nada, sino porque Google me da un espacio limitado y lo estoy acabando. De todas formas, cuando lo acabe abriré el Diario De Mis Motos II y posiblemente lo haga un poco más técnico y menos chominoso que este, o lo mismo no, lo mismo sigo igual; ya veremos. Cuando se acabe el espacio lo pensaré. Mientras tanto, sigo aquí, y como dice un amigo mio, si no nos vemos el año que viene que no sea por culpa mía.
Ea, ya no escribo más. Me voy a hacer las maletas que dentro de unas horas nos vamos a Benidorm. Por cierto, ayer estuve en casa de Resnian apretándole la dirección a la R100RS. Se nos ha quedado un poquito dura, pero ya no la voy a tocar más. Muchas gracias, Jaime, por el botoncito de intermitencias. Me acordaré de tí cada vez que vaya a pasar a alguien. Allí dejé a Jaime con Spinner poniéndole una cúpula a la R65. Buen viaje a todos. Nos vemos dentro de un rato.

miércoles, 26 de octubre de 2011

267.- PORTIMAO: MUNDIAL DE SUPERBIKES

Bueno, me asomo a intentar recuperar de la memoria lo que pasó hace poco más de una semana, cuando nos llegamos al país vecino a ver las carreras del Mundial de Superbikes. No es que la cosa estuviese muy interesante, porque prácticamente estaba todo el pescado vendido, eso sí, con Checa campeón del mundo desde Magny Cours, que ya era hora de que este chaval pillara algo importante, pero como hemos ido a todas las carreras del mundial de Superbikes desde que se inauguró el Autódromo do Algarve, allá por outubro de 2008, pues como que no podíamos dejar de ir. Ya había organizado el viaje con bastante antelación, algo así como un par de meses antes, y me había reservado un apartamento por un precio buenísimo: 25 euros el dia; lo único es que no estaba en la playa, que quieras que no son las afueras del pueblo, porque más allá solo está la mar océana. Como digo, estaba en el centro de Portimao, pero en el centro-centro y eso nos dio más d eun quebradero de cabeza y no solo a nosotros.
Bueno, a lo que iba, que como siempre me pongo a divagar: salimos el sábado día 15 tempranito, a eso de las ocho de la mañana, con lo que, y teniendo en cuenta que nos ganamos una hora al entrar en Portugal, pensábamos estar en los entrenamientos sin perdernos casi nada.
Un par de horas después estábamos en el circuito. Para el que no lo sepa, la gasolina está mucho más cara en Portugal, por lo que es conveniente entrar con el depósito lleno, que algo te ahorras. No había excesivo tráfico y lo único que nos llamó la atención es que parece que los vecinos quieren hacer de peaje la autovía que recorre el sur del Algarve. Mala cosa.
Aparcamos en la puerta principal del circuito, por cierto, todo muy bien organizado, solo podían entrar en ese aparcamiento motos, y fuimos por las entradas, que ya las había comprado por internet y estaban esperándome a que les enseñara el email justificativo junto con el DNI. En un par de minutos volvíamos a estar encima de la moto camino del interior, con los billetes en el bolsillo.


El primer año pecamos de pardillos, dejamos la moto en la entrada principal y después tuvimos que darnos la gran paliza de andar, pero ya somos unos expertos en el Circutio de Portimao, así que nos conocemos todos los trucos para entrar rápido, dejar la moto vigilada directamente por los guardinhas (los civiles de allí), colocarnos en los sitios mas espectaculares, encontrar los servicios menos ocupados y las cervezas mas fresquitas y salir luego rápidamente sin pillar los atascos.
Esta vez nos fuimos a la entrada que está a unos 100 metros de la curva 8, una curva muy cerrada de derechas en subida, muy bonita, donde se suele ver bastante juego. Allí vimos los entrenamientos libres de Superbikes.

Cuando acabaron nos fuimos dos curvas más allá, después de una bajada y subida, desde donde se ve un buen tramo del circuito y donde también hay adelantamientos.


Hicimos algunas fotos, nos comimos lo que llevábamos preparado para la mañana (zumos y bocadillos)


y cuando nos los terminamos empezamos con las cervecitas.


Pero para entonces ya había pasado bastante tiempo. Hice algunas fotos, que, lógicamente no pueden salir tan bien como las que hice en Jerez, pero es que ahora estábamos a bastante más distancia, pero, bueno, que ahí están.















También vimos alguna que otra caída, como esta de Barragán,



o esta del nuevo compañero de Checa, que no recuerdo ahora mismo como se llama, afortunadamente sin problemas de ningún tipo.


Con el final de la disputa de la Superpole, que se la llevó Rea, nos fuimos a Portimao a buscar el apartamento, que como decía al principio estaba en todo el centro del pueblo. Nos costó Dios y ayuda encontrarlo, más que nada porque era un edificio de pisos normales y corrientes con un cartelito minúsculo y escondido avisando que se trataba de los apartamentos Flamingo. Dejamos la moto aparcada en la puerta (no tenía garaje) y subimos las maletas. Nos dimos un buen duchazo y nos fuimos a pasear por el pueblo. Encontramos a duras penas un Continente, y eso que estaba a menos de 100 metros del apartamento, pero escondido, compramos unas cuantas cosas para preparar al día siguiente (mas bocadillos, zumos, etc) y los dejamos congelarse en la nevera del apartamento porque ya habíamos comprobado que saliendo con los alimentos y bebidas congelados desde Sevilla estaban a punto a su hora. Después nos fuimos a tomar unas cervecitas a un bar de los de pueblo de verdad, con unos langostinos riquísimos, y un poco más tarde a la cama, que a las 4 de la madrugada había carreras de MotoGP y queríamos verlas, aunque al final nos quedamos con las ganas porque el televisor morroña del apartamento solo pillaba tres canales.
Por la mañana nos duchamos, recogimos y empaquetamos todo, desayunamos y nos fuimos nuevamente al circuito. No había nadie en la recepción, así que, al igual que muchos otros moteros que habían elegido el mismo sitio para dormir (y algunos también se habían perdido) dejamos las llaves en el mostrador y adios, muy buenas.
Había bastante más tráfico que el día anterior, pero nada exagerado. Nos equivocamos de salida de Portimao, de forma que no era ninguna de las dos que yo me conocía, pero con tan buena fortuna que tardamos hasta menos tiempo porque estaba mucho menos concurrida que las otras dos.
Volvimos a repetir el recorrido que hicimos el día anterior, nos comimos todo lo que teníamos en la mochila y disfrutamos con alguna de las carreras. Estuvieron muy bien la de Supersport, la primera de Superbikes y las de Superstock, no así la segunda de Superbikes, que fue bastante aburrida. Aquí os pongo algunas fotos de la pelea que se trajeron Guintolí, Checa y Rea y que ganó nuestro compatriota.


Tres vueltas más tarde.


El final de la carrera.


En Supersport también se dieron caña e incluso hubo alguna caída



Entre las dos fotos solo un par de segundos, lo que tardó la cámara en recuperarse. El piloto iba en el límite de adherencia.
La segunda carrera de Superbikes fue bastante mas rollo, y tal como llegaron a la primera curva llegaron a la linea de meta, pero bueno tampoco estuvo mal del todo.


Cuando acabaron las carreras, nuevamente en camino y a velocidad endiablada, porque los vecinos le arrean al mango bastante y cuando te das cuenta estás rodando a la misma velocidad que ellos, que si no te pasan por la izquierda, por la derecha y por arriba. Los laser de la R1100S a esa velocidad sacan todos los decibelios y asustan al personal a un kilómetro a la redonda. Estaba deseando llegar a España para poder circular a velocidades normales... aunque fuese bajo la amenaza de un radar.
En cuanto cruzamos la frontera a repostar, y ya más sosegados hasta Sevilla, donde llegamos a eso de las ocho y pico de la tarde.
El año que viene volveremos a ir, pero esta vez vamos a probar la bancada de meta que es lo único que nos queda por probar, y de hotel, al Casino, con los equipos.

martes, 25 de octubre de 2011

266.- UNOS ATRASOS QUE TENIA EN EL BLOG

Si, llevaba un poco de atraso. He intentado ponerme al día en varias ocasiones, pero unas veces por una cosa y otras por otra, lo he ido dejando, pero ahora toca el tiempo de volverse un poco atrás en el tiempo, ni más ni menos que a mediados de mes para recordar un par de cosas y dejarlas anotadas aquí.
Lo primero que tengo que recordar es que el día 12 de octubre me fui a Ronda a cambiar de moto y a hacer alguna que otra cosa. Lo primero fue aprovechar que la R80ST estaba encima de la mesa y con el motor frio para hacerle una puesta a punto, que dos días antes había estado perezosa para arrancar, tanto que hasta se había fundido media batería. Repetir otra vez cómo se hace una puesta a punto de balancines casi no vale la pena, porque se puede encontrar en este blog la técnica con toda facilidad, pero sí que recordaré aquí que para poner a punto estas motos es imprescindible seguir los siguientes pasos, y por orden:
  • puesta a punto de balancines
  • puesta a punto de encendido
  • puesta a punto de bujias
  • carburación
Saltarnos estos pasos solo nos llevará a tener que repetirlos porque difícilmente obtendremos unos resultados buenos. Como siempre, es más económico trabajar bien que mal.
Así pues, me puse con los balancines, que los dejé listos en pocos minutos


Acabada la puesta a punto de los balancines, y tras cerrar los culatines, puse a punto el encendido. Para ello lo primero es colocar el plato de inercia con la S asomando por la ventanita (se mueve el rotor con una llave allen en el sentido de las agujas del reloj hasta que nos aparezca)

y seguidamente conectamos el tester al enchufe que va al regulador


Seguidamente encendemos el contacto de la moto (girando la llave, claro) y si la moto está en su punto se nos encenderá la luz roja del tester. En mi caso no ocurría esto, así que tuve que aflojar los dos tornillos que fijan el bote del encendido y moverlo hasta que se encendió el testigo, momento en que el encendido está bien ajustado. También se puede hacer con la pistola estroboscópica, pero esta vez me ha dado por hacerlo así porque tenía ocupada la batería cargando y no podía enchufarle la pistola.
A todo esto, a esta segunda operación me ayudó el Vecino Misterioso, que había decidido darse un paseo en moto y se le ocurrió asomarse a ver si estaba trabajando.



Estuvimos charlando un buen rato, le enseñé lo bien hecha que estaba la funda de la R100RS y nos echamos una cervecita. Cuando tocó la segunda decidió que era hora de marcharse, previo un primer aviso por teléfono por parte de su esposa, que sabe el peligro que tiene.
El resto del tiempo lo empleé en lijar un poco las piezas que tengo pendientes, arrancar la R80ST y darle unos pequeños ajustes de carburación, ya que el último día lo único que hice fue limpiar carburadores y dejarla a la espera de los otros ajustes para carburarla. Ni que decir tiene que con la batería cargada y la puesta a punto que le hice solo tuve que enseñarle la llave para que arrancase.
Me volví en la R1100S porque el fin de semana nos íbamos a Portimao a ver las carreras del Mundial de Superbikes y me parecía la más apropiada, más que nada porque a mi mujer no creo que le haga mucha gracia ir en la R80ST, ni mucho menos en la R65, que no tiene maletas, y la R100RS estaba a la espera de su turno de revisión para dejarla preparada para Benidorm
Por la noche, y dado que era miércoles, hubo Barriles, aunque la asistencia mirlera fue flojita, pero de todas formas allí estaba la representación: Eli, Maricruz


Luigi, Jaime,


Angeloso (ligando, por supuesto, y de dos en dos)


y Roberto y un servidor contando las excelencias del botellín de Cruzcampo.


Y así acabó el día del Pilar. Pensaba contar también en esta entrada el viaje a Portugal y las carreras, pero mejor la hago aparte, aunque después de lo del pobre Simoncelli tengo poco espíritu de contar cosas.

domingo, 23 de octubre de 2011

265.- HASTA LUEGO, SIMONCELLI

Se ha ido esta mañana, con solo 24 años, casi un niño, y un gran futuro. Apenas dos vueltas después de empezar la carrera de Sepang, cuando nos estaba deleitando con una conducción de las suyas, sin miedos, junto con Bautista: te paso, me pasas, te repaso y me vuelves a repasar. Se le va la moto de la parte delantera y se va hacia la izquierda, por la tangente, en una curva de derechas, perdiéndose su imagen en el monitor, pero de repente vuelve a aparecer. Ha debido levantar un poco la moto, lo justo para que agarrase la rueda y volviese a meterlo en la pista, pero con tan mala fortuna que en ese mismo momento pasaban Edwards y Rossi que no pueden evitarlo y le golpean arrancándole el casco. Simoncelli se queda tendido en mitad de la pista, no sé si inconsciente o ya muerto.
Me ha impresionado grandemente que ha sido precisamente su afán de lucha, ese querer enderezar una moto que ya estaba caída, lo que le ha llevado a la muerte.
Con Simoncelli se podía estar más o menos de acuerdo, que si era un kamikaze o que si la pinta que tenía con esos pelos, pero en lo que todos estábamos de acuerdo es en que era un gran piloto y que lo daba todo en la pista. Todo, hasta la vida. 
Te recordaré siempre, Marco. Muchas gracias por todas tus carreras. Espero verte en el Cielo de los motoristas, tal como te vi en Jerez en primavera: con esa pinta de darle un susto al miedo, montado en un scoooter por el paddock. Hasta luego, Marco.

lunes, 10 de octubre de 2011

264.- FRENOS, CARBURADORES Y LACA A MOGOLLON

Por fin es sábado. Llevo toda la semana pensando en las cosas que tengo que hacer. Voy a tener que hacerme una agenda de cosas pendientes, además de las que ya llevo hechas y que procuro dejar aquí en el blog. El viernes por la tarde me llegué al concesionario a buscar un kit de reparación de pinza de freno que había encargado diez días antes. No lo conocía y la verdad es que viene muy bien, hasta con piezas que ni se me ocurriría cambiar en condiciones normales, como los dos tornillos que cierran las dos mitades de la pinza.


Como se puede ver en la foto trae los dos guardapolvos de los pistones, la junta tórica que cierra la unión entre ambas mitades de la pinza, las dos juntas de estanqueidad de los pistones, los dos tornillos para cerrar la pinza y un sobrecito con vaselina que se debe dar a todo excepto a los tornillos.
Bueno, como digo, el sábado tempranito me fui para Ronda con la R65, a la que no consigo hacer que funcione el cuentakilómetros, así que no sé a qué velocidad voy, cosa que tampoco tiene mayor importancia salvo en determinados tramos donde hay colocadas máquinas recaudadoras. Y es que no sé si tendrá algún pellizco el cable o algo así, porque coloco bien todo el mecanismo, pero no hay forma de que el impulso generado por el imán llegue al reloj.
Llegué a Ronda sin anécdotas dignas de mención, con temperatura de 21 ºC y con viento flojo durante todo el camino, o sea un paseo muy agradable, disfrutando a tope de la R65, especialmente en las zonas de curvas ¿os he dicho que me encanta como se mueve esta motito?
Después de los preliminares (limpiar casco, enchufar ordenador y compresor de aire y avisar de que he llegado) me puse a la tarea con la bomba de freno de la R80ST. La semana pasada había limpiado perfectamente una bomba de 12 que tenía guardada en un cajón, y la idea era sustituirla por la que tiene puesta, que también es de 12 para ver si iba algo mejor.
Eso se cambia en un momento, pero para el que no sepa cómo es, ahí va: Primero se quita el interruptor de la luz de freno; despues se quitan los dos tornillos que sujetan la bomba


y sin sacarla, porque nos va a servir de soporte para poder hacer fuerza, aflojamos el tornillo del latiguillo


y ya podemos sacar la bomba con cuidado de que no nos caiga liquido de frenos en ningún sitio, que se lleva la pintura con una facilidad pasmosa.


A continuación coloqué la bomba que con tanto esmero había limpiado y pintado la semana pasada y la llené de líquido de freno.


Tras un pequeño sangrado la bomba empezó a coger presión y aunque no va tan dura como la de 13, que era la que me gustaba, no queda mal, así que la dejo puesta.
Y desmonté la que acababa de quitar para guardarla bien limpita.





La tórica tiene pasta de juntas, lo que me recuerda que alguna vez perdía y se la puse. Ahora, con mi caja de tóricas del Lidl, que me regaló mi amigo Manolo, ya me apaño. Espero que no se la coma el liquido de frenos.
Y como me ha ido tan bien con los ultrasonidos, pues metí las piezas en el aparatito y lo puse a trabajar.


Mientras tanto, yo me iba a la siguiente tarea: arreglar la pinza de freno delantera derecha de la R100RS, pero para no volver a la bomba, os dejo puesto que al cabo de varias sesiones de ultrasonidos el aspecto del agua era este


y el de la bomba, una vez montada, este.


Me gustan los ultrasonidos ¡lástima que el aparato tenga tan poca capacidad!
Volviendo a la pinza de freno de la R100RS, lo primero que hay que hacer es aflojar los tornillos propios de la pinza, no los que la sujetan a la botella, que si no, después, tendremos que buscar un sitio para poder inmovilizar la pinza, y seguro que no encontramos ninguno mejor que el suyo.


Una vez aflojados ya podemos quitar los de sujeción a la horquilla.


Ahora desenchufamos el latiguillo y aprovechamos el capuchón del sangrador para taponarlo y que no nos pierda liquido



Ya podemos coger la pinza e irnos para el interior de la Guarida a trastear encima de la mesa en vez de hacerlo todo agachado.
Los tornillos están un poco feos, así que les doy un repaso con el cepillo de alambre de los chinos (es mas blando que el normal)


y se quedan así de bien.


Ahora desmonto toda la pinza, incluidos pistones y juntas, y resulta que tiene todo este montón de piezas.  ¡Qué cosas!


Tras un concienzudo limpiado de todas y cada una de las piezas comienza el montaje. Primero ponemos el retén del pistón con un poquito de vaselina de la que viene en el sobrecito.


A continuación ponemos un poco de vaselina al pistón y también lo colocamos en su sitio.


Untamos otro poco de vaselina en el guardapolvos y lo ubicamos en su lugar.


Con esto ya tenemos montada media pinza.


Ahora nos vamos por la otra y repetimos la operación, pero una vez acabadas las operaciones de la anterior añadimos la pequeña tórica en su sitio


y ya podemos cerrar poniendo los tornillos nuevos, que son más bonitos.


Como me ha sobrado un poco de vaselina se la pongo a la cara posterior de las pastillas de freno, la que no está en contacto con los discos. Normalmente en esta zona se pone grasa de cobre, pero últimamente las reservas de grasa de cobre mundiales están muy escasas por acaparamiento del mercado por un tal Spinner, al igual que las láminas de cobre, que también han sido acaparadas a nivel mundial por un tal Robemumoto.


Monto las pastillas de freno en la pinza





Y la fijo a la botella. Aprieto bien todos los tornillos, conecto el latiguillo y sangro el freno


Parece que ha mejorado algo y ahora me entra la tentación de pedir otro kit de estos y repasarme la otra pinza, pero por una vez me parece que voy a hacerle caso a aquello de que si funciona bien no lo arregles.
Con esto creo que dejo la moto preparada para Benidorm. Si acaso le daré un repaso a la carburación y a las válvulas la semana antes, pero de todas formas me la llevo a Sevilla, además de porque le toca, para ver si necesita alguna otra cosa. La volveré el día del Pilar y me llevaré la R1100S con la que iremos a Portimao el fin de semana próximo.
Acabado el trabajo con la R100RS preparé los trastos de laquear y me dispuse a ir por faena.


Tengo problemas con la laca que acaban en formación de piel de naranja y creo que dependen de varios factores: la dilución que le hago, que posiblemente sea demasiado espesa y el no usar siempre la misma pistola, lo que genera que la forma de tirarla nunca sea la misma. Esta vez he vuelto a caer en este último problema, y es que he usado la pistola de Resnian, una SATA con pico de 1,4, en vez de usar la mía, que posiblemente sea peor, pero es a la que estoy acostumbrado. No vuelvo a hacerlo más. El miércoles les devuelvo sus pistolas al Tato y a Resnian y me apaño con las mías. Ademas de haber usado una pistola nueva posiblemente he diluido un poco más de la cuenta (tengo que buscarme un medidor de esos de densidad de pintura) y encima me ha atacado mi mal fundamental: las prisas. He intentado corregir un descolgado echando más pintura, y no solo una vez, sino varias veces. El resultado es que si antes tenía piel de naranja ahora tengo descolgados. Cada vez estoy más convencido de que esto solo es cuestión de práctica y que importa un bledo la pistola con tal de que no sea una trompetilla.
Bien, el caso es que he laqueado las piezas que tenía pendientes y con sus descolgados y todo se han quedado así:





Mientras se secaban las piezas me volví a la R80ST, que estaba pendiente de una puesta a punto general y que como no me iba a dar tiempo de hacerla decidí dividirla en un par de sesiones: una de carburadores y otra de válvulas y encendido. Y ahora tocaba la de carburadores, y no por nada, sino porque les tenía ganas, así que subí un poco la mesa para trabajar a gusto y me puse a la tarea. Primero el izquierdo, que al darle la vuelta tenía mas mugre que los de JuanR65.


Por dentro no estaban mejor. Una capa de caramelo del que se les forma a estos carburadores tapaba los flotadores y la cuba. Me imagino que la luz de los distintos conductos debía presentar un aspecto similar.


Pero eso no es nada para mi generador de ultrasonidos


En un ratillo el aspecto era este


Lo único malo de limpiar el carburador con este sistema es que no cabe entero en la cuba, de forma que hay que ir haciéndolo a tramos. Primero la cuba y todos los gicleurs, después medio cuerpo del carburador, después el otro medio cuerpo... un poco rollo, pero se queda estupendamente.
Bien, después de la limpieza a conciencia, incluido soplado de todos los conductos, queda volver a montarlo todo. Primero la parte de abajo, y ya aprovecho para dejar el tornillo de mezcla a su apriete de salida: 3/4 de vuelta desde cerrado completamente (sin apretar)



y después la parte de arriba. Muy importante dejar las membranas sin pellizcar y con los resaltes en su sitio. Solo tienen una postura, así que solo hay que pensar y observar un poco para saber cual es.



y cerrar la tapa superior. Por cierto, muy aconsejable cambiar los tornillos que traen estos carburadores por unos planos o mejor por unos allen. No hay color, los originales se pegan al aluminio y precisan de un destornillador de golpe a poco que te descuides para sacarlos.


Se coloca el carburador en su sitio


y se desmonta el del otro lado, que todavía tiene más porquería.


Repetimos las mismas operaciones y el resultado viene a ser el mismo: un carburador limpio; como debe estar.



El próximo día, que será el del Pilar, que ne es la patrona de España, pero como si lo fuera, válvulas y encendido y R80ST nueva para una buena temporada.