sábado, 28 de enero de 2012

281.- SEGUNDA PARTE DEL RETEN DEL CIGÜEÑAL Y OTRAS HISTORIAS

Acabo de llegar de Ronda y no he podido acabar la R80ST porque me faltaban algunas piezas. Bueno, vamos por partes. Hoy no voy a empezar por como estaba el día, si hacía frío o si la carretera estaba mojada, que las dos cosas, sino que voy a empezar contando que cuando volví la semana pasada con la R65 lo primero que hice fue pedir cita en la ITV -cumplidor que es uno- y vi que estaban totalmente ocupados lunes, martes y miércoles. El jueves no me venía muy bien, y el sábado la hora que tenían libre era a las 11,30, con lo que me rompía todo el día, así que me decidí por el viernes. Ayer me fui todo contento a cumplir con mis deberes de ciudadano pagano, aparqué la moto en la puerta de la oficina y entré. Cuando llegó mi turno me acerqué a la amable señorita y le entregué el permiso de circulación y la tarjeta de inspección técnica. Me miró, miró al ordenador y volvió a mirarme. ¿A qué hora tenía usted cita? Dentro de tres minutos, le respondí con cara de autosuficiencia sabiéndome más puntual que el más estricto de los británicos. La amable señorita volvió a rebuscar en el ordenador y volvió a mirarme, esta vez con cara de pitorreo. Si señor, dentro de tres minutos y siete días, exactamente. La cita es para el día 3 de febrero. Aun así, intenté un último recurso. Tenía el papel de la cita junto con los demás papeles. Lo saque y se lo enseñé a la amable señorita con aire de ahí te he pillado, guapetona, que traigo la cita, que para eso la imprimí. Recogió el papel, lo leyó y me lo subrayó. Efectivamente, aquí lo pone: el día 3 de febrero. 
Ya no tengo edad para que se me suban los colores, pero me noté un poquito de calor por el cuello y detrás de las orejas. Recogí mis papeles en silencio y me retiré. La amable señorita, compadeciéndose de mí, acertó a decirme: lo malo es que tenemos todo el día lleno, si no, le metería en algún hueco. Ya ni insistí, balbuceé un muchas gracias, me di la vuelta y me fui. 
El resto de la tarde del viernes lo pasé en casa de Roberto, junto con Luigi_bogser y el propio Roberto acabando de recomponer la moto de Angeloso, que tenía un poquito de caja de cambios desde que fuimos a Benidorm a Halloween. Cuando acabamos, a las tantas, me volví a casa y me metí en la cama. Esta noche he soñado con la amable señorita.
Cuando me desperté, a toda pastilla a Ronda, que tenía ganas de acabar la R80ST. Ya sabéis que no me gusta nada eso de dejar los trabajos a medio hacer, de ahí las prisas que llevo siempre, sobre todo con las pinturas. Me gusta empezar y acabar en el día, pero comprendo que hay veces en que es imposible, y esta vez, ademas de la semana pasada, es una de ellas.
Como me fui a toda pastilla y llevaba la R65 que no tiene maletas, opté por no llevarme unas cuantas piezas pesadas que tengo pendientes de llevarme e inconscientemente también me dejé la cámara de fotos. No pasa nada, me iba diciendo por el camino. Con la cámara de fotos del teléfono móvil se pude ilustrar medio bien la cosa. Ahora veréis como de bien.
Cuando llegué, con un poquito de frío, todo hay que decirlo, me puse a trabajar enseguida. Lo primero, montar el regulador regulable, valga la redundancia, que me buscó el otro día Angeloso para la R80ST, a ver si consigo que me cargue un poquito más la batería y que no tengamos peleas a los cuatro o cinco días de andar por ciudad. Y empieza la ración de fotos del móvil.


A continuación quité la batería, que la puse en carga, el receptáculo donde va alojada la batería, que estaba bastante oxidado y sulfatado, y la caja del filtro del aire.


El filtro de aire es un K&N y estaba bastante sucio, así que he aprovechado para limpiarlo y engrasarlo con sus productos específicos. 


También me he dado cuenta de que el reenvío de la palanca de cambios estaba sujeto por arte de birlibirloque, porque el clip que tenía que sujetarlo no estaba por ningún lado, aunque lo mismo se me ha caído a mi al desmontar, pero desde luego no lo he quitado.


Menos mal que esa pieza se apaña con un clip de papeleria.
Como el propósito era ir saneando piezas, me he entretenido un buen rato en lijar el receptáculo donde se aloja la batería, lo he lavado y lo he dejado secándose. Por la tarde le di un par de manos de pintura negra y lo dejé listo para montar.



Al girar la caja de cambios, obviamente, antes había quitado los tornillos que la sujetan al bloque del motor, para desconectar el sensor de punto muerto observé que la mayor parte de las pérdidas de aceite eran precisamente por la parte de plástico de dicho sensor, que incluso giraba libremente en la parte metálica.


Lo saqué y los sustituí por uno que tenía en el cajón de las cosas que me van dando, y que era de Jaime, pero que no sé si me va a funcionar correctamente, porque es algo distinto al que tenía puesto (a la izquierda el antiguo y a la derecha el nuevo). Por si acaso, lo compro.


Aseé un poco la caja de cambios, que tenía porquería para llenar una espuerta, especialmente en la cara orientada hacia el embrague. Tras un buen petroleado y un rato de brochita y queroseno, se quedó mucho más presentable. Por si acaso, que tiene pinta de viejecito, le voy a comprar también el retén del primario, y esto es la lista del "poyaque", que me la estaba viendo venir.
Desmonté el embrague que tenía los tornillos duros de verdad, tanto que he tenido que coger la barra larga para "convencerlos" de que tenían que salir. Con la barra se han entregado sin condiciones. 


Para la vuelta, pondré aquí los pares de apriete para que no se me olviden.



El disco de embrague, que mira por donde no tenía pensado cambiar, está en 3,85 mm, cuando el límite para esta moto es de 4,5 mm, así que otra cosa que hay que comprar. Este "poyaque" empieza a engordar.


Detrás del embrague había porquería como para llenar otra espuerta.


Otro buen rato de limpieza y ya podíamos empezar las negociaciones, entre ellas quitar el retén del cigüeñal.


Por cierto, el retén nuevo llevaba toda la mañana cogiendo su forma en la botella de Fino La Ina, que parece hecha especialmente para este fin, 


así que en cuanto llegó el momento entró sin oponer más que la lógica resistencia de cualquier retén.


Y ahí paré la operación, porque quiero cambiar también la tórica de la bomba de engrase, otro puntito para el "poyaque".
Se vuelve a quedar todo fuera de su sitio, y lo malo es que la semana que viene es la reunión en la Venta de Alfarnate, así que voy a tener que volver a trabajar el domingo; eso suponiendo que a Todomoto le de tiempo a traerme las piezas que necesito, que me extraña.


Y a todo esto, el viernes tengo la ITV, así que me he vuelto otra vez en la R65, cosa que no me importa porque me encanta esa motillo.

martes, 24 de enero de 2012

280.- PILOTO NUEVO, LIO DE CABLES Y EMPIEZO CON LA R80ST

Los que me conocen saben de mi aversión por los cables, esas cosas que dan calambre, y por esa inquina que les tengo estaba retrasando el cambio de intermitentes y de piloto trasero de la R65. Bueno, realmente no era por eso, sino porque siempre había otra cosa que hacer, pero no me hacía ninguna gracia meterle mano. Este sábado llegó el momento, que ya no puedo retrasar más la ITV de esta moto, que le tocaba pasarla a principios de diciembre. 
Partamos de la base de que casi todo funcionaba bien antes de que yo lo desmontase. Funcionaba el piloto con la luz corta y con la larga, también funcionaba la luz de freno cuando se pisaba el freno trasero o se apretaba la maneta derecha, funcionaban perfectamente los intermitentes y únicamente no funcionaban la luz de posición junto con el piloto trasero ni el warning, pero maldita la falta que me hacen esas dos cosas.
Bien, empecé por quitar el piloto y los intermitentes, que no me gustaban nada, para poner los nuevos.



Con lo que se me quedaron unos cuantos cables, no muchos, sueltos. Ahora quedaba identificar cada uno de ellos. Los identifiqué todos a excepción del correspondiente a la luz de posición, que no conducía electricidad a pesar de que antes de desarmarlo sí que lo hacía. De todas formas, como era el único que quedaba por identificar, estaba claro a qué correspondía. Me hice un pequeño esquema en un papel para recordar que cable llevaba cada cosa y me fui a investigar por qué demonios no llegaba corriente al cable de posición. Buscando, buscando, llego a la ficha de empalmes de debajo del asiento y ahí sigue sin tener corriente. El siguiente paso está, en caso de que el cable esté íntegro, en el faro, así que a desmontar el faro. En estas estoy cuando empieza a llegar gente. ¡Justo el día que tengo que estar más concentrado, me hacen una concentración!


El Vecino Misterioso, Esconde, Carlos, Spinner y dos amigos. No era el mejor día para liarse con los cables, pero aun así, me puse con ellos, desarmé el faro e hice las conexiones que me vino en gana hasta que el piloto se encendió.


Ahora, dos días después, compruebo que todo lo que hice fue conectar la luz corta con el cable del piloto, con lo que cuando pongo la larga el piloto se apaga ¡mal rollo! Lo cierto es que no me dio por comprobar la larga; solo comprobé que aquello funcionaba con la corta y me di por satisfecho. Cerré el faro y me fui a la parte trasera. Hice todos los empalmes que pude y aquello funcionaba bien, así que me dediqué a montarlo todo y se quedó bastante bien; desde luego con mucho mejor aspecto que el que tenía antes. Eso sí, el guardabarros con dos agujeros más. Ya podían ponerse de acuerdo los fabricantes de pilotos con las cogidas.



A todo esto, los visitantes se habían aburrido y se iban; unos para Sevilla y otros para Manilva y yo me quedaba solito con mis pensamientos. Siento no haberlos atendido mejor, pero el tema de los cables me trae a maltraer.


Bajé la moto de la mesa para subir la R80ST, y aprovechando que ya tenía tres motos fuera, saqué tambien la R80ST y aproveché para hacerles algunas fotos para cambiar la portada del blog.



Y ya estaba bien de perder el tiempo, así que a la mesa, que hay que operar. Esta paciente tiene una pérdida de aceite por el reten del cigüeñal, así que hay que desmontarlo todo hasta llegar a él. De paso vamos a ir remendando todo lo que se ponga a mano. Lo primero asegurarla para que no haya caídas tontas.


Y ahora a desmontar. Primero la rueda trasera;


después, con la llave de vaso de paredes estrechas, nos vamos por las tuercas de los ejes del basculante y las aflojamos un poco


aflojamos la abrazadera delantera del fuelle y con una llave de estrella de 10 mm quitamos los cuatro tornillos de la cruceta del cardan. Para esto se mete primera y se quita el que esté mas cerca (yo lo coloco aproximadamente a las 3 horarias visto desde atrás). Ahora enganchamos el que está a las 12 con la llave de estrella y pisamos un poco el embrague a la vez que hacemos como si apretáramos el tornillo, con lo que gira la cruceta. Cuando lo tenemos a las 3, soltamos el embrague y aflojamos. Así, repetimos la operación hasta que han salido los cuatro tornillitos. Por cierto, se deben poner nuevos siempre.



Una vez suelta la cruceta, con una llave allen sacamos los ejes


y extraemos el basculante, que aprovechará para ponérnoslo todo perdido de valvulina.


Ya que estamos aquí, inspeccionamos un poco la parte posterior de la caja de cambios y vemos que, salvo un poco (bastante) de porquería, está todo bien.


Aprovecho también para inspeccionar los cojinetes cónicos del basculante.


Los limpio a conciencia,


engraso nuevamente con grasa de litio, que no sé si será la mejor, pero es la que tenía más a mano


y volví a colocar los cojinetes y los retenes, que por cierto, estaban duros como cuerno de cabra.


Y ya se me había hecho un poco tarde, así que dí por concluso el trabajo con la R80ST, coloqué cada tornillo y cada tapa en su sitio, que es la mejor forma de que no se pierdan, y me fui a darle un fregado a la R65, que se venía conmigo a Sevilla.



Y ahí quedó todo, dispuesto para continuar el próximo día: retirar la caja del filtro del aire, retirar la caja de cambios y el embrague y sustituir el retén del cigüeñal, así que lo primero que tengo que hacer en cuanto llegue es ponerlo en su sitio (la botella de Fino La Ina) para que se vaya amoldando el labio.


A ver si hay suerte con la ITV de la R65. Por ruido no será, que es la más silenciosa de las cuatro, ahora, eso sí, le pediré cita a Resnian para apañar las luces, que tal y como están no paso ni con recomendación.
Edito la entrada un día más tarde para dejar constancia de que ayer tarde le llevé la moto a Resnian y me sacó los colores porque todos los fallos eléctricos de la R65 se debían a un fusible y el filamento de la luz de freno fundidos. Pero ya que estábamos liados, aprovechó y me hizo un remiendo de todas las conexiones que yo había hecho: me quitó todos los conectores y me soldó los cables uno a uno, con lo que aquello ganó un montón. Una vez más, que cada vez que le meto mano a los cables acabo en casa de Resnian, muchísimas gracias por echarme una mano. 

viernes, 20 de enero de 2012

279.- DE PÉRDIDA ARREGLADA, NADA DE NADA

Pues si, lo que presumía que había sido el arreglo definitivo de la pérdida de aceite de la R100RS por las conexiones del radiador de aceite con el termostato, no había sido un arreglo, y cuando volví a Ronda el sábado me encontré con un pequeño charco bajo la moto y una gota en el tornillo más medial que delataba claramente el origen de la sangría. Suerte que había venido de visita Diegofull y me iba a echar una mano. En principio no nos asustamos, cosas peores hemos visto ya. Seguramente será la junta que no ha asentado bien. Desmontamos y cambiamos juntas. Arrancamos el motor y sale un hilo de aceite. ¿Será que no está bien apretado? Dinamométrica y a su par, no vaya a ser que estemos apretando poco ¡qué va! está muy por encima de su par de apriete y sigue saliendo aceite cuando arrancamos el motor. No queda otra que desmontarlo todo. Vaciamos el aceite y lo reservamos para volver a echarlo, que no tiene ni un kilómetro y no está la cosa como para andar tirando los aceites, y quitamos el termostato y los conectores del radiador. Tras una meticulosa observación a pleno sol y con gafas (Diego lo vio mucho antes que yo, que para eso todavía ve bien) encontramos una grieta en el alojamiento del conector mas medial.


Aunque no se ve muy bien, si la retoco un poco con el ordenador nos sale esto:


¿Cual es el origen de esta rotura? Pues inspeccionado los conectores me encuentro con lo siguiente:


El tornillo de la derecha, que es el que ha provocado la rotura no solo tiene los agujeros mas pequeños que el otro, con lo que eso supone de disminución del flujo de aceite, sino que ademas, tiene dos hilos menos de rosca, con lo que, a igualdad de espesor de las arandelas de estanqueidad se mete más en el termostato y ejerce una fuerza mayor sobre las paredes al no apoyar la superficie roscada, sino la lisa, que quieras que no es un poco más gruesa. Eso,. a lo largo del tiempo ha ocasionado la rotura. Vaya usted a saber cuantos años lleva ahí ese conector y hasta ahora no se ha roto. Bueno, afortunadamente tenía guardado el termostato cuya base de apoyo sobre el cárter se me rompió de manera inexplicable hace una temporada y no tuve más que cambiarlo y avería arreglada en un momento. Por supuesto, cambié el conector por uno que tenía nuevo esperando su turno para ponerlo en la R80ST cuando lo coloque el radiador, que será cuando le toque el cambio de aceite. Volvimos a rellenar el aceite, la bajamos de la mesa y la dejamos fuera para lavarla un poco, que estaba bastante guarra con tanto aceite para fuera y para dentro.
Subimos la R90S de Diegofull y allí lo dejé haciéndole el cambio de aceite mientras yo me dedicaba a vestir de rojo la R65. Obsérvese en la pared del fondo que mi mujer y el propio Diego, en comandilla, se han propuesto convertirme la guarida en un taller de verdad. Según ellos solo le faltaba un calendario con una tía en pelota, y allí que me pusieron uno. Menos mal que no es demasiado explicito que se dice ahora, ordinario que se decía en mi época.



Diego se afanaba en sacar el filtro viejo ¡vaya tomate que lió!


y en limpiar los restos de la junta antigua de la tapa


y yo, mientras tanto acababa de vestir de rojo la R65, que quedó tal que así:




Ya solo le falta ponerle el piloto trasero y los intermitentes nuevos y llevarla a la ITV, pero eso será este sábado próximo.
Diego seguía con los apaños de su R90S: filtro de aire nuevo, y ademas K & N


y filtro de aceite de los que vienen cortados por la mitad. Por cierto, se quejaba de que no se lo hubiesen dado sin cortar, y este le costó Dios y ayuda meterlo, así que para poner el otro habría tenido que desmontar media moto. No hay más que ver unas fotos mas arriba como dejó el filtro viejo para suponer lo que tuvo que liar para sacarlo.



Dejamos el trabajo y nos fuimos al motoclub a tomar una cervecita. Cuando volvimos le hicimos un reglaje de válvulas que no le hacía ninguna falta y un intento de poner el encendido en su sitio, pero con los platinos es francamente difícil, así que optamos porque se llevase la estroboscópica y lo hiciese más tranquilamente en su casa, que el sol empezaba a despedirse por el horizonte y había que volver. La vuelta en la R1100S ¡un gustazo! Me estoy aficionando demasiado a esa moto.