¿Y qué hacemos hoy, que es fiesta? Pues podríamos dar un paseito con la BMW. ¡Oh, si, que buena idea, no sé cómo no se me había ocurrido antes! Pues ¿qué vamos a hacer si somos moteros? Motear, está claro. Mañana magnífica; un poco fresquita, pero con el sol fuera, así que es cuestión de tiempo que suba un poco la temperatura. Ademas en esta moto no da miedo el frío; tiene calefacción directa en los pies y protección total de todo el cuerpo, incluidas las manos que son las que mas sufren por muy buenos que sean los guantes. Desde el balcón, un poquito antes de salir, la moto se veía así de bonita.






Hasta casi llegar a Aroche nos acompañaron la niebla y la "rasca". Subimos al pueblo a tomar algo y entrar en calor y nos dimos un paseito por sus calles, que, por cierto, no son como para pasear con una Goldwing, a no ser que sea una Goldwing de trial y la lleve Raga, claro.
Después de una buena caminata por las empinadísimas calles y de una cervecita (sin alcohol, claro) carretera rumbo a Cortegana y a Galaroza, en cuya travesía encontramos un bar con una BMW Scarver aparcada en la puerta.
Nos detuvimos a su lado y aprovechamos para tomar otra cervecita (tambien sin alcohol) y unas tapitas de las chacinas de la tierra ¡que caña de lomo, señores...! La Scarver era de la chica del bar, muy motera ella, y yo diría que ducatista, a pesar de que tiene una BMW, y con ella charlamos animadamente un buen rato, hasta que llegó el momento de seguir hasta Aracena, donde repostamos, nos encontramos con un control de la Guardia Civil que no nos hizo ni el mas mínimo caso, lo que fue muy de agradecer, que ya se sabe cómo las gastan esos, y proseguimos viaje hasta El Garrobo,
donde, en vez de salir a la Ruta de la Plata nos desviamos por una carretera local hasta Gerena. Allí, en un pub que se llama La Mano Negra, paramos un rato y nos tomamos unas cervecitas y unas tapitas ¡buenísimos los montaditos!, ademas de enrollarnos con medio pueblo, en especial con las chicas del bar, que eran muy majas, por cierto. Desde allí, ya, a casita del tirón. Un día apañado. Preciosos paisajes. ¡Lástima de la niebla que nos echó de Portugal! Pero no importa, está ahí al lado, así que repetiremos un día de estos. La moto, por supuesto, ni una pega, que es lo natural en máquinas de esta categoría.

No hay comentarios:
Publicar un comentario