domingo, 24 de agosto de 2008

71.- ACEITE DE HORQUILLA Y OTRAS COSAS

Todavía me quedaban algunos repasillos antes de cambiar segmentos y casquillos de biela, para lo que tengo que estar bien tranquilo y dispuesto a enfangarme bien. Total, solo tiene que estar preparada para mediados de septiembre, ya que cuando ponga segmentos y casquillos de biela la vestiré de invierno, asi que para la Riders irá abrigadita, que en Granada hace frio de noche. Entre esas cosas que quedaban estaba el no haberme quedado totalmente satisfecho con el grupo cónico de la BMW antigua que le había puesto el otro dia. No sé, no me acababa de fiar de que la moto fuese exactamente igual que antes, asi que decidí volver a cambiarlo. De nuevo la misma historia: quitar la rueda, vaciar los aceites del brazo del cardan y del grupo, quitar el grupo antiguo y volver a montar el suyo. Con la práctica que he cogido, esto ya lo hago en menos de veinte minutos.

Por otro lado, venía notando desde hace algún tiempo que se me mancha de aceite la zona del basculante; el fuelle que cierra la cruceta del cardan está siempre mojado y la varilla del empujador del embrague también tiene casi siempre una gotita de aceite en la punta.

El problema es que no veo claro de dónde viene ese aceite. He mirado el nivel de la caja de cambio y está en su sitio. He aflojado las bridas de la goma de la cruceta y la he repasado, pero no he visto roturas; por si acaso, de todas formas, le he dado un cuarto de vuelta, a ver si sigue manchándose.
Una vez acabada la operación de cambio del grupo cónico y montado todo,

he pasado a comprobar el estado de las bujías, a ver qué tal está quemando despues de la carburación del otro dia. Cuando iba a sacar la del lado derecho he sorprendido a la tuerca central que sujeta el culatín derecho, junto con su espárrago, intentando salirse; de hecho estaba casi totalmente fuera. Si llego a andar un par de kilómetros más, seguro que la pierdo por el camino. En tanto desmonto todo el cilindro y le pongo un aserto roscado, he recurrido a meterle un pegamento de dos componentes para que la vaya aguantando unos dias. Las bujías tenían un magnífico color, aunque no se vea bien por culpa del flash, que denota que la carburación es correcta.

Aprovechando que Eolo había ido a tomar café, aproveché para pintar la llanta delantera, que la dejé imprimada el otro dia y estaba pendiente de pintura.

Queda bien, con unos puntos brillantes del estilo de las carreteras gustosas, pero un poco rugosa al tacto. Voy a probar a darle una capa de laca a ver qué tal. El final, como si lo viera, es volver a su color original y echar por tierra todo el trabajo, pero antes voy a probar la laca.
A continuación me dispuse a cambiarle el aceite a la horquilla, que no se lo cambio desde que la compré. Para ello, solo hay que abrir el tornillito pequeño que tiene en la base y dejar que escurra todo, para despues llenarla por arriba, pero esta vez quería hacer un poco de limpieza y pintar las botellas, que estaban un poco deterioradas, asi que tenía que quitarlas. Lo primero es soltar las pinzas del freno y dejarlas colgando de los latiguillos; ya de paso les miré las pastillas, que estaban bastante bien todavía (mas adelante, cuando las cambie, le daré un repaso completo a las pinzas). A continuación, se acaba de soltar el guardabarros delantero, y finalmente se quita la rueda.

Ahora nos quedarán las dos botellas agarradas a las barras. Para soltarlas solo tenemos que soltar el tornillo allen grande que hay en el centro de la base de la botella (el aceite no es por pérdida, sino porque se me olvidó hacer una foto y lo volví a colocar en su sitio).

Una vez que sacamos ese tornillo, la botella queda libre y solo hay que tirar suavemente de ella para sacarla de la barra con lo que nos quedan los dos amortiguadores fuera.

Vaciamos el contenido de ambas botellas y lo limpiamos todo muy bien.
Seguidamente enmascaré las partes de la botella que no quería pintar

y les dí una pasadita de spray, aunque me parece que no me acaba de gustar esta pintura, que es la que estoy usando para la OSSA, pero que para esta moto es demasiado brillante. Cualquier dia de estos les doy con Titanlac, que es satinada.

Mientras se secaban las botellas aproveché para estrenar un artilugio que me ha dejado mi amigo Carlos para despellejar el chasis de la OSSA. ¡Muchas gracias, Carlos! El artilugio es muy efectivo, pero como le predije, iba a durar poco, porque esa moto tiene muy bien agarrada la pintura al chasis. El artilugio era tal que así antes de empezar

y así quedó al rato de trabajar despellejando el chasis...

Ni que decir tiene que tengo que comprarle uno a Carlos, y de paso me compraré otro para mi, que me ha convencido, porque el resultado, poco antes de acabar, era este

En el trabajo, ademas de esta herramienta, también falleció el trompo barato de Leroy Merlin. No, si ocho euros no pueden dar para mucho... De todas formas lo desmontaré a ver qué le ha pasado y si tiene arreglo (aunque no se vea en la foto, echaba humo, por eso lo fotografié), pero de todas formas, DEP. Los dias que ha trabajado conmigo lo ha hecho muy bien. Me esta haciendo falta otro trompo porque el Black Decker de 25 años que se me rompió hace poco tiene los dias contados.

Cuando me aburrí de darle caña al bastidor de la OSSA monté las botellas en las barras, para lo cual solo hay que meterlas con cuidado para no dañar el retén y apretar el tornillo allen de la base al amortiguador.

Y, finalmente, volver a montarlo todo: primero el guardabarros, despues la rueda, y finalmente las pinzas.

Pero quedaba rellenar las horquillas de aceite. Aunque BMW recomienda poner un SAE 10 en cantidad de 230 cc, yo prefiero una suspensión algo (bastante) mas dura, asi que pongo un SAE 20.
Para llegar al orificio de llenado hay que quitar el manillar, y para quitarlo hay que aflojar las cuatro tuercas de los estribos de sujeción del manillar.

Para rellenar habría sido muy fácil si hubiese dispuesto de una llave inglesa grande o de una fija de 30 o así para poder sujetar la caperuza de cierre mientras se extrae el tornillo allen central, pero como no pudo ser, al intentar abrir con la llave allen se movió todo el conjunto y tuve que sacar las dos piezas unidas, lo que no representa mayor trastorno salvo el de que para ponerla hay que vencer la resistencia del muelle de la horquilla a la par que se gira el tornillo, y tengo el codo derecho todavía bastante fastidiado, con lo que empujar me cuesta bastante, y el dolor se acentúa en los movimientos de pronación y supinación del antebrazo, o lo que es lo mismo, que me costó Dios y ayuda volver a ponerlo.

Al final no hubo más problemas, y después de volverlo a montar todo, la cosa quedó bastante bien, y la BMW se quedó a la espera de meterle mano al motor. Me vuelvo en la Sprint (con maletas) y me doy un paseito la mar de agradable, aunque eso sí, reventado de un día de duro trabajo (ocho horas seguidas, sin parar ni para comer).

La semana que viene espero poder meterle mano al motor y dejarla guapísima para la temporada otoño-invierno (estrena falda y posiblemente también sombrero).

sábado, 16 de agosto de 2008

70.- PEQUEÑOS ARREGLOS PENDIENTES

Habían quedado algunas cosas por hacer el otro día, y he aprovechado para acabarlas. Lo primero era volver a desmontar la rueda trasera de la BMW para equilibrarla.
El equilibrado es una operación muy sencilla y muy agradecida a la hora de circular, especialmente para evitar vibraciones; para equilibrar se pone la rueda en el eje, de forma que gire libremente

Como la gravedad es como es, la parte mas pesada se ira a la parte inferior, de forma que cuando la rueda deje de girar el punto mas pesado estará abajo. Para que no se nos olvide donde estaba, lo marcamos con un pedacito de papel pegado o con una tiza, un rotulador... allá cada cual con su arte.

En la parte opuesta al punto mas pesado (A) pegamos un contrapeso (B), que por eso se llama así, de una masa que estimaremos según nuestra experiencia y cómo hayamos visto que tarda en pararse en el punto mas pesado, es decir, con mas o menos inercia, lo que nos indicará si hay mucha diferencia de peso o no. En este caso vi que había muy poca diferencia, por lo que puse un contrapeso de 10 g pegado con un poco de cinta adhesiva de carrocero. Una vez pegado colocamos los dos puntos (el mas pesado y el que tiene el contrapeso) en linea con la horizontal y vemos qué pasa

Si, como ocurre en este caso, la rueda se mueve de forma que el contrapeso se va a la parte inferior (flechas verdes), quiere decir que le hemos puesto más peso de la cuenta, con lo que estamos columpiandonos un poquito (no mucho, que solo eran 10 g). Si, por el contrario, el lugar marcado como el mas pesado fuese el que se va a la parte inferior, nos indicaría que nos hemos quedado cortos y habría que añadir mas peso.
Le quitamos un poco de peso y repetimos la operación; esta vez con solo 5 g. Pego el contrapeso en la parte opuesta al sitio mas pesado y coloco ambos extremos en línea con la horizontal. Ahora la rueda no se mueve, y el contrapeso se ha quedado a 90º con la vertical.

Ya tenemos la rueda equilibrada, aunque casi lo estaba; solo queda pegar bien el contrapeso (un par de golpecitos con una maza para que pegue bien en la llanta) y a otra cosa. Si, da igual ponerlo en medio de la llanta, a la izquierda o a la derecha.
Ya que tenía la rueda fuera, he aprovechado para quitar el guardabarros y hacer una pequeña soldadura, que hace tiempo que se me rompió la chapa superior de las dos que sujetan la tapa derecha de la batería, y ya que estaba quitado el guardabarros, he aprovechado para cambiarlo por el de invierno.

Si finalmente pinto la moto, el que he quitado irá en rojo y el otro se quedará en negro. A todo esto, el de invierno lo es únicamente porque tiene un faldón de goma, porque por lo demás es idéntico al otro.
Bueno, pues una vez desmontado el guardabarros y todo el tinglado eléctrico de la parte trasera (pilotos, intermitentes y toma externa de corriente) para evitar accidentes con la soldadura, he soldado la chapita y he vuelto a colocar todo en su sitio, incluidas las tapas de la bateria que pinté en negro el otro dia y que ya tienen sus pegatinas nuevas.

Con este guardabarros no creo que salpique mucho a los que vengan detrás, porque tapa casi toda la rueda.
Una vez aquí, y como uno tiende a ser "malo", me dije que por qué no probar la moto pero sin los silenciadores. Con una llave de 7 mm y unos alicates desmonté los silenciadores, o dBkillers como les dicen por ahí, en un par de minutos

y arranqué la moto, pero con el estruendo, que de verdad lo es, se despertó mi parte "buena" y me arrepentí. Limpié un poco por encima la carbonilla y los volví a colocar, aunque algo en mi interior me decía que ya puestos, podía haberle abierto otro agujerito como cuando los estrené.
Lo siguiente que hice fue preparar la llanta delantera de repuesto para imprimación y pintura. Primero quitarle la pintura vieja y darle un buen lavado con agua y jabón,

y después, una vez bien seca, una manita de imprimación, pero sin complicarme la vida con las fosfatantes y las historias... con mi imprimación de toda la vida.

A guardarla y a esperar a la semana que viene para pintarla en negro.
Lo siguiente que hice fue equilibrar los dos carburadores con el vacuómetro y carburar correctamente.

y para acabar, sacarla a la calle y dejarla esperando la vuelta, porque después de dos o tres semanas de descanso se vuelve a venir conmigo.

Mientras tanto, y como he encontrado una tienda en Sevilla donde es posible que tengan el piñón y la corona de la OSSA, los he desmontado y me los he llevado para buscarlos. Lo más difícil ha sido quitar la tuerca de sujeción del piñón, porque no tenía ninguna llave de ese tamaño y he tenido que quitarla con una llave de fontanero. Pero al final ha salido, que es lo interesante.

Y ya puestos, le he echado una mirada al embrague

le he puesto junta nueva, he cerrado y le he echado un litro de aceite SAE 20W50.

El camino de vuelta, con la BMW. Todo correcto salvo que me da la impresión de que va mas corta que antes. Le volveré a cambiar el grupo un día de estos. Total, ya le he pillado el truco y lo hago en un rato. La carretera muy mal. El 15 de agosto parece que es el día de sacar a todos los enlatados inútiles a pasear sus estorbitos, y a fe que lo hacen. Todos van pisando huevos.
Y eso es todo amigos.

domingo, 10 de agosto de 2008

69.- HAY DIAS EN QUE ES MEJOR NO HACER NADA

Llevaba varios días atento a una subasta de ebay en que vendían una BMW R80ST. Es un modelo que siempre me ha gustado mucho; la veo muy elegante y muy manejable, y mira por donde me encontré un anuncio en que no solo vendían una, sino que la vendían aquí al lado, en Valencina. La moto tenía buena pinta, y lo único que me hacía dudar es que fuese negra, ya que este modelo solo se fabricó en rojo y en gris.
Intenté ponerme en contacto con el vendedor un par de días antes de que acabara la subasta para preguntarle por el detalle del color y por posibles defectos que pudiera tener la moto, y le escribí a través de abay un par de correos electrónicos a los que no me contestó, al menos antes de que acabara la subasta. A pesar de ello, y aunque no muy convencido por la falta de información, me decidí a pujar esta mañana antes de irme a Ronda, ya que la puja acababa a la una de la tarde mas o menos.
Nos fuimos a Ronda mi mujer y yo a eso de las nueve de la mañana, y llegamos sobre las diez y media. Tenía pendiente desde el otro día el asunto de las llantas, que se habían quedado una de ellas preparada y la otra esperando a que le quitara la pintura. También quedaba por arreglar definitivamente el grupo trasero y probarlo, cosa que no pude hacer porque me faltaba uno de los casquillos de separación. Afortunadamente, ya vinieron al concesionario.
Primer paso: acabar de preparar la segunda llanta e imprimar ambas.
Para la imprimación de las llantas, dado que suelen ser zonas sufridas de la moto, había leído que la fosfatante era muy buena, y había comprado una que se llama Titan 6,5 x 1, que preparé convenientemente. Dado que, según dice en las instrucciones, aguanta perfectamente unas cuantas horas, una vez preparada me puse con el lijado de la pintura, cosa que no me ocupó mas allá de media hora. Coloqué la primer llanta en el "taller de pintado" y apreté el gatillo de la pistola. Allí solo salía una especie de hilo muy pegajoso, como si fuese una telaraña amarilla. Regulé todos los botones de la pistola y empezó a salir algo mas parecido a una imprimación, pero de vez en cuando seguían saliendo los dichosos hilos, que me estaban dejando el trabajo hecho una auténtica porquería. Paré y me dispuse a lijar nuevamente toda la llanta para quitar la porquería que le había echado. Una hora y pico lijando, porque la imprimación esa se pega de verdad, y por fin en estado medianamente aceptable. Ahora probé a imprimar con mi imprimación de toda la vida, que no sé si es fosfatante o qué, pero a mi me funciona. Después de unos minutos, la llanta ya tenía un aspecto mas saludable, a la espera de pintura.

La otra llanta la imprimé con brocha, dándole así una nueva oportunidad a la fosfatante Titan que me había sobrado. Lógicamente, así no salían hilos, y, desde luego seca con bastante rapidez. Esta llanta imprimada con fosfatante es la de reserva, la que tiene el bollo, que va a llevar una goma muy dura y va a ir en negro. Para el color negro he escogido una pintura que se usa para pintar el hierro, con un acabado pavonado. Se llama Oxiron forja, y no sé que tal irá, si aguantará bien en la llanta o no. El tiempo lo dirá. El caso es que la apliqué y el aspecto que le da a la llanta es muy bonito, similar al de la de la Sprint. Haré lo mismo con la delantera de repuesto, después de darle una segunda mano, y así se quedará el juego de llantas bueno de color gris plata y el suplente en negro.

La otra llanta la pinté en gris plata con un spray de los de coche. Tal que así quedaron ambas:

Mientras tanto, Maricruz estaba preparando la goma que le iba a poner a la llanta buena, la gris, un Bridgestone BT45R.

Por cierto, me la ha dejado de lujo.

En principio, esta rueda iba a ir sin cámara, y ya tenía preparada desde hace tiempo la válvula lateral para ponérsela (los que tenemos una BMW de estas sabemos lo tremendamente difícil que es inflar las ruedas, y una válvula de estas es una bendición).

El primer fallo que tuve fue intentar ponerla sin que la llanta estuviese totalmente seca, y digo totalmente porque sí, al tacto no manchaba ni era pegajosa, pero esto hay que dejarlo secar mas tiempo. Me pudo mas la impaciencia; el tiempo se echaba encima y quería probar si el cardan viejo funcionaba bien o no. Como digo, primer fallo, pero no único. La válvula requiere apretar bastante para poder roscar la tuerca desde la parte interior de la llanta. La presión que hacía con los dedos era totalmente insuficiente para hundir la goma de cierre y permitir que se enroscase, así que, segundo error, usé un par de mangos de madera entre los radios para empujarla. Resultado: la pintura saltada. Lógico; si aún no estaba seca del todo. ¡Maldita impaciencia! De todas formas, de perdidos al río. Esto lo acabo yo; ya le daré una manita de pintura por encima. Válvula puesta. El tiempo seguía corriendo así que enseguida a montar la goma. La monté rápidamente, pero no conseguía hacerla talonar: el aire se iba entre la llanta y la cubierta y no se inflaba. Solución: quitar la válvula, mi preciosa válvula lateral y montar una cámara. Nuevamente a desmontar y volver a montar. Ahora sí que conseguí que talonase: a los 5 kg/cm2. Ajustar presión y montarla en la moto. Por cierto, monto la goma nueva con 11670 km. Con el casquillo de separación nuevo funcionaba perfectamente: no se quedaba frenada al apretar la tuerca del eje y no se quedaba separada del grupo. En su sitio, vamos. El aspecto, con el grupo antiguo también es aparente, pero, y aquí otro error, se me olvidó equilibrarla. ¡Otra vez las puñeteras prisas...!

El siguiente paso era probarla. La bajé de la mesa de operaciones, la arranqué a la primera ¡después de dos semanas de no coscarse! calenté un poco mientras bombeaba el freno trasero para que tuviese presión y me di un paseo hasta el Puerto del Viento. La primera impresión, buena; la moto iba mucho mejor que antes. La goma es mas agradable que el Metzeler que tenía puesto, e incluso me dio la impresión de que el grupo era mas largo, aunque no puede ser, porque la relación es la misma, 33/11, pero a mí me lo parecía: a 5000 rpm 150 km/h. Quizás fuesen las curvas tan tremendas de la carretera que me hacían entrar un poco colado muchas veces las que me daban la impresión de velocidad. Ya lo miraré, creo que había una gráfica por ahí, en algún lado de internet.
Para el próximo día ya tengo trabajo que hacer: segunda mano de pintura a la llanta negra y equilibrar ésta. Si me da tiempo, es decir, si está bien seca, montarle una goma a la llanta negra, aunque me parece que la dejaré secarse bien para no meter la pata. Sigo pendiente de abrir el motor para cambiar segmentos y casquillos de biela, pero para eso necesito un poco más de orden y tiempo por si algo sale mal.
La vuelta fue terrible: como me temía, se me hizo de noche, y la Sprint es una de las motos que peores luces tiene del mundo. Mira que tiene tres faros; pues no sirven más que para las cortas. La luz larga da igual llevarla encendida que apagada. Es una moto que dista mucho de la definición de Sport Turismo: no tiene buenas luces, no es capaz de llevar el equipaje de manera adecuada con las maletas de fábrica y da un calor tremendo. Eso sí; es muy bonita y anda muy bien, pero para viajar es un petardo, especialmente en trayectos largos de varios días con equipaje y en viajes nocturnos.
Cuando llego a casa me conecto al ordenador a ver qué ha pasado con la subasta de la R80ST, y mira por donde, esta vez he ganado la subasta, pero me encuentro en el correo un mensaje del vendedor, escrito a las 17,35 horas del sábado (cuatro horas después de la finalización de la subasta) diciéndome que ya había vendido la moto.

Total, que para una vez que consigo ganar una puja en ebay (las otras tres veces anteriores en que había pujado me quitaron el articulo en el último momento), resulta que el tío es un cara y, o ha vendido la moto por otro lado sin avisarlo, (en ebay es factible suspender una subasta) o le ha parecido poco precio la puja ganadora (1800 euros) y me ha contado una milonga para venderla más cara. Desde luego que cuente con mi voto negativo y la denuncia del caso en ebay. Por lo menos que no vuelva a vender ahí.
En fin, días tontos de los de mejor quedarse viendo las olimpiadas en la tele. Eso sí; me he entrenado montando y desmontando gomas y me he ganado un buen dolor de espalda.

martes, 5 de agosto de 2008

68.- CRAIG JONES: IN MEMORIAM

En la carrera de Supersport del pasado domingo tuvimos ocasión de presenciar durante la retransmisión por televisión, el terrible accidente sufrido por Craig Jones en la curva de entrada a meta del circuito de Brands Hatch, cuando faltaban pocas vueltas para finalizar la carrera. La primera impresión fue de muy mala caida, ya que el piloto estuvo arrastrandose por la pista inconsciente durante un buen trecho. No pusieron la repetición de la caida, por lo que no pudimos apreciar exactamente lo que ocurrió, pero parece que debió irsele la moto de detras y cuando cayó el piloto que iba detrás, Andrew Pitt, no pudo evitarle y le golpeó en la cabeza. Como estaban luchando por las primeras posiciones, los segundos siguientes a la caida fueron muy angustiosos, ya que Craig se quedó inconsciente en medio de la pista mientras a su lado pasaban a toda velocidad el resto de los corredores. Inmediatamente se paró la carrera y se atendió a Craig en la propia pista. No se ofrecian imágenes de lo que estaba pasando, lo que no auguraba nada bueno, y al tiempo, la evacuación del piloto tambien se prolongaba mucho, señal de que debían estar reanimándolo en el sitio para poder trasladarlo en condiciones lo mas favorables posibles. En cualquier caso, todo presagiaba la gravedad de las lesiones. Fue trasladado finalmente al hospital y falleció en la madrugada. El Mundial de Supersport no será lo mismo sin él. Descanse en paz.

sábado, 2 de agosto de 2008

67.- ¿Y QUÉ PONGO HOY, SI CASI NO HE HECHO NADA?

Acabo de volver de pasar un día de calor tremendo. Me he sentado un momento y me he repasado la prensa digital mientra pienso qué voy a poner hoy en el diario, si en realidad no he hecho nada. Bueno he hecho un par de cosas, pero muy largas y monótonas, así que resultan poco interesantes para contar. Leyendo, leyendo, me encuentro con que el Director General de Tráfico, el Sr. Navarro, D. Pera (lo siento, pero en mi idioma, y el de 500 millones de personas, las cosas se escriben como se pronuncian) dice que está estudiando si consultarnos a los ciudadanos (yo, en realidad, prefiero considerarme pueblerino) donde colocar los radares. Estoy esperando ansioso que me consulte para indicarle donde los puede colocar, y de paso darle la dirección de un afamado médico proctólogo para que le apañe mi consejo (por cierto, tiene unos dedos como morcillas de Burgos este galeno). En el mismo artículo se lee que tiene la desfachatez de decir que el colocar un radar casi cada 500 metros es por nuestra seguridad (ahora se llama asi a la recaudación indiscriminada de impuestos), cuando por nuestra seguridad lo primero que debería hacer es irse a su casa, en vez de ir maquillando las cifras de muertos para quedar bien delante de su jefe, y a la par hacerle quedar bien a él.
Yendo a lo que iba, me he dado el paseito semanal hasta Ronda para trastear en las motos, pero no ha sido tan placentero como otros días. No sé por qué, pero hoy tenía menos seguridad en las curvas. No se me ha movido la moto ni un pelo y tampoco he ido rápido porque media carretera está en obras y la prohibición de adelantar es omnipresente en forma de raya amarilla en el centro de la calzada, pero no me sentía seguro. Los pilotos le dicen a eso que no tienen buen feeling. Pues eso me pasaba, que no tenía buen feeling. Para acabar de redondear la faena, en uno de los tramos de no asfaltado-asfaltado, cerca de El Coronil, han dejado un escalón de no menos de cinco dedos, y me ha pillado un poco desprevenido, de forma que me he lastimado el codo derecho, donde ahora mismo llevo una codera que da calor como si fuese una manta eléctrica.
En cuanto a motos, habíamos quedado en que me habían hecho una chapuza infecta. Pues bien, he desmontado el grupo cónico y he podido comprobar que lo que yo creía que era una pieza soldada al interior de la caja del diferencial no era mas que un apaño que había puesto el mecánico en sustitución de la pieza numero 4 del diseño que ponía el otro día; había cogido un pedazo de tubo del diámetro que a él le pareció apropiado, y que no era suficiente, pues el eje de la rueda tiene tres diámetros distintos, y solo abarcaba dos. El caso es que cortó el tubo, también, a la distancia que consideró oportuna, y que también era insuficiente, pues no separaba completamente la rueda de la caja del diferencial, de forma que si se apretaba un poco la tuerca del eje se producía rozamiento, o incluso la detención completa del movimiento. Por cierto, lo que yo identificaba el otro día en el esquema con el numero 3 como una pieza soldada al interior de la caja del grupo no era mas que este pedazo de tubo que había acabado soldándose. En el esquema, la pieza numero 3 es un retén.
Cuando llegué a Ronda no sabía todo esto, que lo descubrí después de desmontarlo todo. Lo primero que hice fue comprobar la relación del grupo diferencial antiguo, que resultó ser la misma que la del original (33/11),

así que, convencido de que había una pieza soldada dentro del grupo (y en efecto, lo estaba) vacié los aceites y lo desmonté del brazo del cardan. Y en efecto, allí estaba la pieza, pero pude quitarla sin hacer estropicio alguno, simplemente con unos alicates (supongo que algo tuvieron que ver los martillazos que le di el otro día). Tenía la opción de volver a montar el mismo grupo, el suyo, o montarle el viejo. Me animé por la segunda opción, mas que nada por probar si hay alguna diferencia, que no debe haberla, y por la cuestión estética, y así, de paso, le doy una manita de limpieza y pulido al otro. Dicho y hecho: en un momento lo monté y le puse aceites nuevos.

Ahora debería haber puesto la rueda y haber probado la moto, pero tengo unos pequeños problemillas para eso: me sigue faltando la pieza numero 4 para ambas ruedas; están encargadas en el concesionario, pero ayer todavía no habían llegado, así que me quedo sin poder montar las ruedas. Además, ya puestos, me gustaría pintar la llanta que tiene el llantazo de color negro - ¿cómo quedará eso? - y montarle un neumático duro, por ejemplo un Macadam 50, para tenerla como rueda de emergencia, y ya que estábamos en faena, a la otra llanta le hacía falta un buen repaso estético.
Lo primero que hice a continuación fue comprobar el estado de la llanta que pasa a hora a ser "titular". Para empezar, una vez desnuda del neumático, tenía un aspecto de necesitar un buen tute para dejarla limpia

La puse en el equilibrador y me dio bastante mejor resultado que la otra; apenas un par de pequeñas imperfecciones; nada grave.



Me puse manos a la obra y apenas empezar con la limpieza ya se notaban los resultados

Después de varias horas de cepillado de púas y lavado con estropajo nanas, y de dejar una buena capa de polvo de la pintura vieja, los resultados eran bastante satisfactorios.

Así, pues, aquí acabó el día de trabajo. Dejé ambas llantas preparadas para pintura y posterior montaje de neumáticos.

A una, como decía mas arriba, le pondré un Macadam 50 con cámara (eso ya lo tengo) y a la otra le pondré un Bridgestone BT 45 sin cámara y con válvula lateral; el Bridgestone en teoría debe llegar el lunes, pero hasta el fin de semana próximo no creo que pueda hacer nada, que ya se me han acabado las semivacaciones, aunque me quedan otras semivacaciones para septiembre :-)